De Regalos y Nueces

Ahora que se acercan las Navidades que se supone que son tiempo de regalos, hablemos de estos:

A todos nos encanta recibirlos, pero sin embargo hacerlos es otro cantar, normalmente por varios motivos, a veces es cosa de que la persona en cuestión "tiene de todo" y para ti lo que debería ser un acto "feliz" se convierte en un suplicio. Aquí alguién en su día se inventó lo que viene a ser modalidad boda. Es decir.... Una lista extensa de cosas que uno quiere de distinto valor ó en su defecto dinerito para comprarse todas esas cosas.

A veces también es un suplicio hacer regalos no por el hecho de pensar en qué le comprarías, sino por el mero hecho de que no te apetec eun huevo ni la yema del otro hacerselo pero tienes que hacerselo, para este tipo de ocasiones un pequeño consejo recomendatorio, regalale un libro. Si se lo lee y le gusta, quedarás bien, si no se lo lee, el problema suyo que no lee y así le va...

Las menos veces son cuando quieres regalar algo y no te llega, eso es una putada, así que debes contraatacar con algo que sorprenda a esa persona y tenga un alto valor emocional, a veces una cena inesperada, una noche de novios, un spa... algo que valga mas por el valor emotivo que por el económico.

Normalmente estos últimos son los regalos mas sanos de todos, porque demuestran nuestras emociones y son tan personales que dificilmente podrían esperarse de otra persona. Regalar bufandas o corbatas es mas o menos fácil, pero regalarle tiempo y emociones a alguien es otro cantar.

Sé que la mayoría de vosotros estareis pensando qué carajo me ha pasado para escribir este texto tan así hoy, en vez de mis conocidas parrafadas irónico festivas, y la respuesta es nada... solo que os estoy regalando algo de mi tiempo y de mis pensamientos. Espero que os guste.



Asi