Aliron! Aliron!

Igual hay alguien que no se ha enterado, pero La Liga empieza el Sabado, asi que explicaremos de dond viene una de esas palabras que Rodean el futbol ("Entonar el Alirón", "Conseguir el Alirón",etc.."
Asi que resumire un articulo aparecido en prensa en Elcorreo hace un tiempo.

En tiempos romanos, el historiador Plinio el Viejo habló de «una gran montaña de hierro» en la costa cantábrica. Más tarde, las ferrerías medievales transformaban el metal en anclas, aperos, clavos y armas exportadas a Europa.

Plinio El Viejo debía referirse al pueblo viejo de Gallarta (Bizkaia), al cual se lo tragó la tierra.

En los años cincuenta descubrieron que debajo de Gallarta se extendía un inmenso yacimiento de hierro y empezaron a comerse el pueblo a golpe de dinamita.

Como consecuencia de esto la metalurgia vizcaína ganó tanta fama que durante un tiempo en inglés se usó la palabra 'bilbo' como sinónimo de algunos hierros (como en esta cita de Shakespeare en 'Hamlet': «I lay worse than the mutines in the bilboes», «Me sentía peor que los amotinados con sus grilletes»).

Mientras en otros sitios sacaban mineral con una ley del 46% o el 48%. Esta mina tenía como mínimo un 58% de hierro aunque las mejores vetas se agotaron en veinte o treinta años, pero al final recurrieron a las partes menos ricas y la rentabilidad cayó en picado.

Al calor del hierro se levantaron toda una industria y llegó el tiempo del alirón, grito de una época efervescente.

Si el hierro extraído era muy puro, los mineros cobraban paga extra. Se pasaban la noticia con un canto triunfal: ¿Alirón! ¿Alirón! Eran las palabras que los ingenieros británicos habían escrito con una tiza en el mineral: 'All iron'. ¿Todo hierro!

Sin embargo no todo era euforia. Los obreros padecían condiciones tan miserables que la esperanza de vida cayó por debajo de los 30 años. En 1827 ya había mineros que habían construido chabolas en la zona alta de la montaña, cerca de los yacimientos, para no tener que subir todos los días. Con la gran fiebre del hierro brotaron las aldeas champiñón, racimos de barracones que se levantaron en el monte, y en 1877 se fundó La Arboleda (así llamado porque se situaba junto al único resto de bosque que resistía a la deforestación brutal).

En cada barracón se hacinaban mineros que se organizaban con camas calientes (tres o cuatro personas se turnaban por horas una misma cama, apenas un tablón) y había chabolas con varias familias que incluso cocinabandentro. Las jornadas laborales eran terribles -diez horas y media en invierno, trece en verano-, las neumonías se propagaban voraces, los accidentes dejaban un reguero constante de heridos y muertos...

Pero eso si... cuando esta semana nuestro equipo salte al campo, todos desearemos al final de la temporada que nuestro equipo entone el Aliron!!!!

Reparito 2.07